miércoles, 14 de enero de 2009

MARTES Y TRECE, DÍA DE MALA SUERTE. ¿FICCIÓN O REALIDAD?



Ayer fue martes y trece. Un día, para muchos, de superstición, mal agüero, etc. En España un martes que caiga en el día 13 se considera fatídico. Seguramente razones sobran si se quiere pensar que el martes 13 es un día de mala suerte, pero el sentido negativo que los supersticiosos dan a esta día no tiene fundamentos científicos, ni religiosos. Hay gente que, por contra, lo ven como día de buena suerte.
El considerar al martes como un día de mala suerte ha dado origen a diferentes refranes y supersticiones:
- En martes ni te cases, ni te embarques
- El martes ni gallina eches, ni hija cases.
- El martes ni hijo cases, ni cochino mates.
- En martes ni tela urdas, ni hija cases, ni las lleves a confesar porque no dirán la verdad.
- El martes ni tu casa mudes, ni tu hija cases, ni tu ropa tajes.
Algunas de las supersticiones con las que nos podemos encontrar son:
- No tener trece invitados en la casa
- No cortar el pelo durante ese día, porque trae mala suerte.
- Tampoco nos podemos cortar las uñas porque según cuenta la tradición nos saldrán padrastros
- Algunos edificios omiten el piso13, saltando en su numeración del 12 al 14
- Los aviones de algunas compañías no tienen en su numeración dicho número, a la fila 12 le sigue la 14

¿Pero de dónde viene todo esto?
Parece ser que el número 13 es símbolo de mala suerte desde la Última Cena, en la que Jesucristo se reunió con los doce apóstoles. El trece se referiría a Judas, el apóstol que traicionó a Jesús, y la fatalidad atribuida al Martes se debe a su asociación con el dios Martes, dios de la guerra, que implica la muerte. Aunque también podríamos encontrar alguna referencia en la mitología nórdica en la era pre-cristiana. Se cuenta que a un banquete en el Valhalla fueron invitados doce dioses. Loki, el espíritu de la pelea y el mal, llegó sin invitación con lo cual el número de los presentes llegó a 13. En la lucha que se produjo para expulsar a Loki, Balder, el favorito de las deidades, encontró la muerte. Esta fue una de las primeras referencias escritas sobre el fatídico día trece. Esta superstición se difundió a través de Europa, hacia el sur y al comenzar la era cristiana ya estaba establecida en los países mediterráneos. Esta creencia fue reforzada con el episodio de la Última Cena.
Existe en alemán la expresión „Jetzt schlägt's [= die Glocke] aber dreizehn“, es decir, ahora van a dar las trece horas para expresar que va a ocurrir algo anormal o extraordinario. En este caso, se refiere al reloj, que sólo marca doce horas y lo que pase de doce se sale de la cuenta y no se puede controlar mediante cronómetro.
En La Bella Durmiente, de los hermanos Grimm, la hija del rey quedó condenada a dormir cien años porque sus padres solo tenían doce platos de oro y así no pudieron invitar a el hada número trece para celebrar el nacimiento de la hija.
Existen supersticiones similares en otras tradiciones. Así, si no me equivoco, en la cultura anglosajona un viernes que caiga en 13 cumple el mismo papel que nuestro martes y trece y en Italia el 17
Sin embargo, el trece no es siempre el número funesto. En algunas culturas, como la oriental, se consideraba un número divino
Y si comparamos el día de ayer con cualquier otro día ¿seguro que el martes y trece es tan fatídico? A mí personalmente me parece que no, sin ir más lejos el lunes doce fue para mí infinitamente de más mala suerte que el martes trece.

Martes y Trece, mala suerte ¿ficción o realidad?

4 comentarios:

Alonso de Molina dijo...

uff, ayer cometí una torpeza, me corté las uñas de los pies y me comí la de los dedos de la mano, temo a los padrastros... tal vez disfrutas Ana con el tormento ajeno,podías haber avisado al menos un día antes, pero tuviste que hacerlo justo un día después cuando ya no hay marcha atrás.

Así y todo gracias, anotaré en mi agenda los trece y martes del 2009
.

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Ana Villalobos Carballo dijo...

ay, siento haber llegado tan tarde pero es que no me funcionaban las teclas del ordenador,no soy supersticiosa pero es que era martes y trece, y no sé si sabes que...

"en martes y trece ni postees ni escribas curiosidades en estampas insolentes"
jeje.

Un beso

Ana

FANNY JEM WONG M dijo...

INTERESANTE Y ENTRETENIDO
BESOS
JEM WONG

Antonio del Camino dijo...

Habría que tener también en cuenta (y este comentario va, obviamente, con el adecuado tono irónico) aquellos versos que decía Don Mendo:


... todos iguales para mí seréis:
trece, catorce, quince y dieciséis.

Continuaré asomándome a esta ventana.

Un cordial saludo,